lunes, 14 de julio de 2008

Creer siempre

El Centro Cristiano Nueva Vida (CCNV) realizó el Cierre de Trimestre el sábado 12 de julio en el Micro-estadio de Argentinos Juniors, donde se encontraron alrededor de 5.000 personas. Las calles aledañas al micro-estadio, fueron llenas por 48 micros que llegaron desde diferentes zonas de la Capital y Gran Buenos Aires.

La reunión dio comienzo con un tiempo de oración por milagros: “Una noche de Milagros es una noche de encuentros”, dijo Norma Nápoli, responsable del área de Mujeres del CCNV, al momento de orar por cada uno de los presentes. La reunión continuó con las palabras del pastor fundador del CCNV, Guillermo Prein, quién condujo la reunión junto con Carlos Volpe, también pastor, hasta el final.

Todos los presentes tuvieron en claro que hace más de 10 años que el mensaje volcado al CCNV es para invertir en el campo; hoy se traduce con fuerza en criar vacas. La carne será consumida por poblaciones que hasta ahora era impensado que lo hicieran, pero esta transformación se dará porque toda palabra que encuentra lugar en quien la cree y desarrolla, se cumple.

Como toda palabra tiene su cumplimiento, también se hizo referencia a los siguientes tres meses del año, julio, agosto y septiembre como el tiempo de: “Las recompensas”. “Para el pueblo que demostró fidelidad y respeto a la Palabra dada por Dios, al que puso atención y por obra lo que decía en el evangelio de Lucas: Mirad como oís, es el pueblo que recibirá remuneración y recompensa”, dijo Guillermo Prein.

Otro punto fuerte del mensaje hizo referencia a la fe como una actitud constante en la vida del cristiano, pero en especial en 2008 será la que dirija y oriente cada vida. Cada victoria obtenida dependerá de la fe, entonces “Los que alcanzan el milagro no son los que creen mucho si no los que creen siempre”.

Creer siempre significa atravesar, con el mismo ánimo, los momentos de alegría como los de dificultad sabiendo que Dios nunca llega tarde, como sucedió esa noche donde todos los presentes pudieron oír en la voz de su Pastor: “Dios ha visto cada una de tus lágrimas, y es por su amor que derramará bendición y poder”.

Ese amor estuvo presente en las palabras y en los hechos, como una afirmación contundente. Un ejemplo de esto fue Dora, que llegó en silla de ruedas a causa de un tumor en la columna que le impedía caminar, y luego que los niños oraron por ella, se puso en pie y comenzó a caminar ante los ojos de todos los concurrentes.

Pero Dora no fue la única en comprobar el poder sanador de Dios, muchas otras personas contaron lo sucedido en sus vidas. Y si bien, los milagros ocurren a diario, en los diferentes lugares de oración, son inevitables las expresiones como lágrimas, aplausos y palabras de gratitud, de quienes son sanos y de todos los presentes.

Es importante aclarar que los milagros no se traducen sólo en sanidad, también es un milagro ser libre de las adicciones. Por eso se proyectó un video que resumió la tarea realizada durante la campaña “Volvé”, en el ámbito de la semana de la lucha contra la droga. “Este Dios de Milagros y Maravillas, no lo podemos esconder”, dijo Carlos Volpe, pastor del CCNV.

Por supuesto que no es el trabajo de un día o una semana, por eso la Iglesia siempre está en las calles donde la necesidad se corporiza en un enfermo, un adicto, un chico que duerme a la intemperie.
Ya casi sobre el final de la reunión, nuevamente el pastor Guillermo Prein se dirigió a los presentes y dijo: “El pasado se terminó, la violencia impuesta, la inflación sufrida y las mentiras en los medios, tenían ya un final cierto y contundente. Que no se olviden que el Cielo Gobierna”, así la convicción quedó instalada en el alma: “Creer siempre” trae la respuesta de Dios a cada hombre y mujer.