martes, 7 de abril de 2009

DONDE ESTÁ EL LADRÓN


Muertes, robos, desconfianza, rejas, cambios de hábitos y horarios.

La inseguridad, presente hace décadas en nuestro medio, se instaló en primera plana, provocando una tremenda batalla de conceptos y formas de ver la vida. Pena de muerte, sí; pena de muerte, no…

Voces del pasado y del presente que batallan sin tregua, no encuentran soluciones, solo contiendas.

Jueces, políticos, showmans, actores, dirigentes pro derechos humanos, víctimas junto a infames corruptos y desfachatados funcionarios y ex funcionarios, artífices de recuerdos y realidades, se amontonan en una disputa que, como primera consecuencia, trae la realidad de un alboroto que no permite distinguir quién es quién.

Como dijera Don Enrique Santos Discépolo: “Cualquiera es un ladrón, cualquiera es un Señor”.

Discusiones funcionales a los padres de la inseguridad, quienes elaboran planes que pasan inadvertidos por el ruido de las peleas mediáticas.

La gran pregunta: ¿a quién beneficia la inseguridad?

Su respuesta nos dará una clara y contundente visión de la realidad.

Existen verdugos y amos que, por lo general, muy pulcros, se camuflan entre nosotros como buenos muchachos. Estos no dudan en sacrificar a los verdugos de turno, sabedores de que tienen reposición asegurada.

El paco, ¿cuánto tiene que ver en la inseguridad? ¿Quién lo vende y lo promueve? ¿Para qué?

¿Hay solución para lo que nos toca vivir?

Más allá de medidas gubernamentales o de fallos judiciales, existe un refugio, para guarecer tu vida y herramientas, para que puedas construir un futuro mejor.

Escribo a las víctimas pero, también, a los victimarios. Responsabilidades, posibilidades y advertencias…

 

ASÍ ES DON NAPO

“La historia es una serie de mentiras aceptadas”, Napoleón Bonaparte.

El caballo blanco de San Martín, desde las altas cumbres nevadas, nos narra cual Mister Ed –equino que hablaba en una antigua serie de televisión– cómo Moreno murió de tuberculosis y French y Beruti repartían escarapelas el 25 de mayo de 1810, con los colores de una bandera creada en 1812 –visionarios adelantados, ¿no? –la gente con sus paraguas (todavía no creados) en la plaza… y otras interesantes historias,

Mentiras registradas y enseñadas que, a fuerza de repetición, se hicieron verdad; como dijera Goebbels , jefe de prensa de Hitler, quien sostenía que una mentira repetida cien veces se transforma en una verdad.

Sólo para darle un ejemplo, las elecciones de 1857 dieron como resultado el triunfo de Bartolomé Mitre. En los registros históricos y en la memoria quedó fija esa realidad. Claro que, hasta hoy, nadie explicó cómo logró ese triunfo don Bartolo. Excepto, Sarmiento, su fiel aliado, que sí lo hizo, cuando en su carta a don Oro, fechada el 17 de junio de 1857 expresó: Para ganar –las elecciones del 29 de marzo- nuestra base de operaciones ha consistido en la audacia y el terrorque empleados hábilmente han dado este resultado. Los gauchos que se resistieron a votar por nuestros candidatos fueron puestos en el cepo o enviados a las fronteras con los indios y quemados sus ranchos.  Bandas de soldados armados recorrían las calles acuchillando y persiguiendo a los opositores. Tal fue el terror que sembramos entre toda esa gente, que el día 29 triunfamos sin oposición. El miedo es una enfermedad endémica de este pueblo. Esta es la palanca con que siempre se gobernara a losporteños, que son unos necios, fatuos y tontos.”

Don Bartolomé, para asegurarse su buena reputación, fundó un diario, La Nación, sí, el mismo que perdura hasta hoy.

Alguien dijo que fue el político más hábil porque tuvo un medio de prensa que le cubrió las espaldas y que contó la historia como le convino.

Aquellas operaciones histórico-pedagógicas se fueron transformando –Mitre mediante– en las operaciones periodísticas y mediáticas de nuestros días.

Es bochornoso ver cómo se intenta reinstalar a personajes nefastos de nuestra historia reciente como si fueran pulcros y santos.

Esto, sumado al miedo provocado por zonas liberadas en las que todo puede pasar, genera un doble efecto: primero, amnesia del pasado reciente y, segundo, hace creíble al más mentiroso.

 

CÓMO CONOCERLOS

En julio de 2008 veíamos azorados cómo en el Senado hablaban Rodríguez Saa, Menem y Saadi, y eran victoreados por las diferentes carpas instaladas ilegalmente en la Plaza de los Dos Congresos.

Hoy, de Ministros, Diputados, Senadores, ex funcionarios y ex presidentes de la Nación que deberían estar presos por sus actos, la prensa no habla, ni los menciona. ¿Algunos ejemplos?

El ex presidente Duhalde, responsable de la pesificación que con el corralito saqueó el 66% de los ahorros de los argentinos y autor de la famosa frase: “tenemos la mejor Policía del mundo”, refiriéndose a la Bonaerense, junto al Palito Ortega, quien de la mano de Charly García se vuelve a instalar despacito en el plano público, y Felipe Solá, quien fuera Secretario de Agricultura Ganadería y Pesca del Presidente Menem –artífice de los contratos pesqueros más bochornosos y perjudiciales que haya firmado la Argentina– Gobernador de la Provincia de Buenos Aires en años conflictivos en los que la criminalidad aumentó significativamente en ese distrito… Bueno, no quiero cansarlo, todos ellos resurgen como los muertos vivos saliendo de su hediondas tumbas, emblanquecidos por una prensa cómplice que sirve, solamente, a intereses mal habidos.

A lo lejos, se sienten muy débiles los cánticos que, al ritmo de las cacerolas, proclaman: “Que se vayan todos, que no quede ni uno solo”… Se escuchan bajito porque la potencia de los medios los tapa.

Don Marcelo Hugo y doña Susana –nada más como referentes– se olvidan de los días en los que, cual biombos, taparon la realidad de quienes con sus políticas y sus negocios sucios y encubiertos, llenaron el país de “paco” –droga que, en tan sólo un año, destruye a quien la consume– haciendo de muchos jóvenes y no tan jóvenes, adictos descontrolados que pueden cometer cualquier barbarie sin tener noción de lo que hacen. Estos, con territorios liberados, son los verdugos modernos, que aterrorizan a una población que ve un incremento voraz de delitos, sobre todo, en épocas preelectorales. Actúan por si solos, pero en los causes de los territorios y zonas preparadas por quienes maquiavélica e impunemente diagraman el mapa del horror. Cuando no son más funcionales, los matan o dejan que mueran solos por su adicción. A esto se suman muchachos entrenados, como los que otrora produjeron los saqueos –la gente con las cacerolas no saqueaba, solo reclamaba por sus ahorros–, profesionales del delito, mano de obra desocupada o como quiera llamarles, que son capaces de imitar un asesinato a la mexicana, si así se lo encargan los patrones de turno.

Parece que los muchachos leyeron a Sarmiento y le creyeron, ampliando más allá de las fronteras porteñas su consigna: El miedo es una enfermedad endémica de este pueblo. Esta es la palanca con que siempre se gobernará a los porteños, que son unos necios, fatuos y tontos.”

Observe a quién beneficia electoral y, sobre todo, económicamente la inseguridad y sabrá quien es el que la gesta con el objetivo de dominarnos. Analice a quiénes beneficiaron las políticas y leyes en determinados gobiernos –municipales, provinciales o nacionales– y descubrirá el verdadero poder detrás del poder. El poder económico.

Jesús enseña: “por sus frutos los conoceréis”. Es hora de reaccionar y la primera medida es dejar de escuchar discursos y ver cuáles son las acciones de estos actores de nuestra realidad. Hechos, no palabras. Apelar a la memoria y tener conciencia es la base para la salida de este drama que nos amenaza a todos.

Lo único que queda para juzgar la historia son los hechos y estos son inamovibles y contundentes.

 

AMARGO INVIERNO

Permítame mostrarle un caso testigo, el de la provincia de Tucumán.

Próspera y pujante de la mano de su industria azucarera, la provincia se desarrollaba intensamente hasta que, a comienzos de los ´60, llegó al Ministerio de Economía de la Nación, y a la cartera de Trabajo, don Álvaro Carlos Alsogaray.

Ingeniero Militar y Aeronáutico, autor de la famosa frase “hay que pasar el invierno” , fue ministro de Economía y Trabajo del Gobierno del Presidente Frondizi, retomando sus carteras cuando este fue depuesto por un golpe de estado, quedando el ejecutivo en manos de José María Guido.

Desde sus funciones y con la colaboración de un Secretario de Agricultura Ganadería y Pesca llamado José Alfredo Martínez de Hoz, destruyó la dulce industria tucumana, cerrando la mayoría de los ingenios azucareros, medida que benefició a potencias extranjeras, al mermar Argentina en su producción y dejó 650 mil obreros en la calle. Quizás por esto, durante el gobierno de facto de Juan Carlos Onganía, fue premiado con de cargo de Embajador en Estados Unidos.

La Revolución Argentina de la cual el General Juan Carlos Onganía fue el líder, tenía entre sus generales insignes a Julio Alsogaray, hermano de Álvaro. Julio pasó a la historia como el triste personaje que tuvo la tarea de entrar en el despacho del presidente Arturo Illia para informarle que había sido depuesto. Su hijo Juan Carlos, oponiéndose a su padre y familia, se enroló en las filas de Montoneros y murió bajo las balas del tristemente célebre Comisario Oscar “Malevo” Ferreira, quien confesó ese crimen años antes de suicidarse en público ante las cámaras de Crónica Televisión. Trágica relación de los Alsogaray con el Jardín de la República.

Súmele, a los 650 mil obreros con puestos fijos de trabajo, con sus obras sociales y jubilaciones, sus familias y descubrirá un tendal de gente en la calle.

La actividad económica fue reemplazada por la producción limonera que tenía una zafra anual, realizada por obreros golondrina, a quienes no se les pagaba ningún beneficio social.

Así, se abarataron costos para los amos que usaron a este economista como verdugo.

El caldo de cultivo generado por esa situación, abrió las puertas a Montoneros que se hizo fuerte en Tucumán.

En 1976 el Proceso de Reorganización Nacional derrocó a la Presidenta María Estela Martínez de Perón y nombró Interventor de dicha provincia al General Antonio Bussi, quien realizó una tarea de “limpieza” dejando muchos más que los 800 muertos y desaparecidos por los cual es juzgado aquí y en el exterior, como es el caso de España donde el juez Baltasar Garzón lo imputa por la muerte de ciudadanos españoles. Su macabra tarea lo dejó tan desequilibrado que requirió atención siquiátrica, por lo cual fue internado en su momento. Luego, en el período democrático, se presentó y ganó elecciones en ese distrito.

Quizás se pregunte, ¿cómo lo logro? Es muy simple…

Mató a los opositores escudándose en la “guerra” que enfrentaban y deportó a los pobres e indigentes, a quienes llevó a otras provincias en camiones o aviones, abandonándolos muy lejos de sus fronteras nativas, para que no pudiesen volver.

Esta “limpieza” apoyada y financiada por los poderes económicos beneficiados, quienes junto con el poder religioso elaboraron las listas de las personas que debían desaparecer y en la era democrática desarrollaron una campaña de temor por el cruel pasado reciente, mostraban al General como el garante de la seguridad. Estole permitió instalarse en la arena política.

Cuando Bussi dejó de ser útil, esos poderes vieron con mucho agrado emerger la figura del cantautor Ramón Ortega. Popular, proveniente de una familia humilde, representaba el candidato ideal para seguir adelante con la tarea de oprimir al pueblo.

Claro que, gracias a las operaciones mediáticas, nadie recordó que el “Chango” durante las épocas de gobiernos militares hacía películas de propaganda para estos. En ellas, los militares eran siempre honestos y buenos… Además, ladero de la empresaria Amalia Lacrozede Fortabat, única proveedora de cemento de la represa Yacyretá, monumento de la corrupción, según calificara el ex presidente Menem.

La tarea despiadada de Ortega dejó a los niños tucumanos con sus vientres inflados por la desnutrición, imágenes para nosotros lejanas de los sitios más pobres de la tierra, ahora en nuestro suelo. La comunidad internacional reaccionó mandando contenedores de alimentos para palear el hambre de los niños en el Jardín de la República del Granero del Mundo…

Finalizada su tarea, fue promocionado por los mismos poderes para ser senador, cargo en el cual fue acusado de corrupción y coimas, escándalo que provocó la renuncia del entonces Vicepresidente de la Nación y Presidente del Senado, Carlos “Chacho” Álvarez.

Conclusión: diferentes gobiernos, defactos y democráticos, avalados por operaciones mediáticas, que cauterizaron memorias, destruyeron un paraíso beneficiando a poderes que, desde las sombras, como verdaderos amos,  utilizaron a los verdugos más aptos para dominar.

Es interesante, pues fue en el programa de Susana donde, lágrimas mediante, el “Palo” hizo el descargo de las acusaciones de corrupción.

Hoy, de la mano de Charly García, cantando “La felicidad, ja, ja, ja”, recibe notas periodísticas de estrictos diarios como Perfil, cuyo director Fontevecchia le realizó el domingo 29 de marzo una benévola nota, de apenas 6 páginas, con las más variadas fotos junto al revolucionario autor de Alicia y al director del medio, en ella, incluso defiende a Susana…

 

LA PATAGONIA REBELDE

Para evidenciar con mayor fuerza la relación entre los poderes de turno y el poder real, basta con mencionar a la familia Martínez de Hoz.

Acaudalados estancieros, aparecen en 1801 cuando, José MaríaMartínez de Hoz en representación del Cuerpo de Comercio, le hiciera llegar al Virrey español Joaquín Pino y Rosas una carta donde afirmaban: “…que el comercio de negros, cuya permanencia es necesarísima, únicamente se permita hacer por buques nacionales de construcción propia o nacionalizados…”.

Dicho pensamiento era coherente con los postulados del partido esclavista, que aún entrada la libertad en 1810, siguió operando en el Río de la Plata, con dirigentes como José María.

Luego, en 1866, junto con otros apellidos “ilustres”, fundaron la Sociedad Rural Argentina (SRA) y financian la Campaña al desierto, masacre aborigen. Como recompensa, el Presidente General Roca, le “regaló” 2,5 millones de hectáreas (has.), el equivalente a 25.000 km2, un territorio más grande que la provincia de Tucumán, en la Patagonia.

Otras extensiones menores, 750 mil has., fueron para familias como Alzaga Unzué, Anchorena y unas 65 mil has. recibió el triunfante General Roca, devenido en Presidente de la Nación.

A juzgar por la recompensa, el poder económico-financiero fue 40 veces mayor al del ejército que hizo el trabajo sucio.

Domingo Faustino Sarmiento, sí, el de la palanca, fustigó tales acciones desde su columna del diario El Censor del 18 de diciembre de 1885: "Es necesario llamar a cuenta al presidente y a sus cómplices en estos fraudes inauditos. El presidente Roca, haciendo caso omiso de la ley, cada tantos días remite por camadas a las oficinas del Crédito Publico órdenes directas, sin expedientes ni tramitaciones inútiles, para que suscriba a los agraciados, que son siempre los mismos, centenares de leguas".

Unos 41 millones de has. a estancieros y 7 millones a militares fue el balance total del reparto.

Los mismos personajes apoyaron, luego, la cruel represión de los peones rurales patagónicos en 1921, masacre conocida como “la Patagonia Rebelde”.

En la lista figuran apellidos como Miguens (antecesor de Luciano, el hasta hace poco presidente de la SRA y adjudicatario del Tattersall, fenomenal negociado del que nunca pagó ni siquiera el exiguo canon de $ 1.200 por 5 has., ubicado en la avenida del Libertador, en el predio de Hipódromo Argentino, que cuanta con magníficos edificios históricos, que se alquilan por U$ 50 mil por noche y a quien por los buenos oficios del entonces presidente Duhalde, le condonaran las deudas), Olivera, Temperley, Amadeo, entre otros, conocidos hasta hoy por la participación política de sus descendientes.

Para evidenciar más claramente las relaciones, cabe mencionar que el actual presidente de Confederaciones Rurales Argentina (CRA) Mario Llambías, es primo de don José Alfredo Martinez de Hoz…

 

¡¡¡GRITÁ ALCORTA!!!

Han pasado revoluciones y discursos, pero nadie se ha atrevido a tocar los derechos abusivos de poderosas familias. Ni el General Perón que combatía al capital…

Es una pena que la Federación Agraria Argentina, que representa a los pequeños y medianos productores agropecuarios, haya olvidado la historia.

Fundada en 1912, en ocasión de la huelga de arrendatarios y aparceros contra los terratenientes, mal habidos miembros de la Sociedad Rural Argentina, que pasó a la historia como el Grito de Alcorta.

Esta noble entidad, en sus orígenes, propugnaba la reforma agraria integral con revisión de los títulos de propiedad de la tierra.

Con el conflicto de la (resolución) 125, aquella reforma, fue fagocitada por un personaje como Llambía, olvidándose de sus postulados.

Su presidente Eduardo Bussi, que nada tiene que ver con el genocida de Tucumán, el año pasado no asistió a la tradicional Exposición Rural de la Sociedad Rural Argentina, haciendo notoria con su silenciosa su postura su indignación. Se recluyó en un centro de descanso adventista de la localidad entrerriana de Puigari.

La razón fue que, después de la noche de la votación en el Senado, que derogó el decreto 125, al buscar el apoyo de las otras dos entidades para obtener mejores beneficios para los más pequeños y débiles en la cadena productiva agropecuaria, es decir, sus representados, recibió el cachetazo sonoro de la negativa de sus pares adinerados.

Mucho me gustaría saber qué opinarían el señor Llambías, quien muy religiosamente en cuanto acto protagonizó, colocó a la virgen del Carmen en el estrado, y su primo Joe Martínez (el de la tablita y plata dulce que hizo crecer la deuda externa un 368% a su paso por el ministerio de economía, el mismo que era Secretario de Agricultura Ganadería y Pesca en la presidencia del José María Guido, cuyo Ministro de Economía era Álvaro Alsogaray, con quien desarrolló el macabro plan de destrucción de Tucumán), si supieran que en la Biblia existe un antecedente de ley agraria.

Dada por Dios a Moisés, ella, es ecológica, ya que ordena trabajar la tierra seis años y dejarla descansar el séptimo, el año del reposo. A su vez, cada siete períodos de siete años, llegaba el Jubileo. El año 49 era de reposo y el 50 tampoco se trabajaba la tierra porque era fiesta, un recomenzar.

En el año del Jubileo se perdonaban las deudas y se repartían las tierras nuevamente, según la productividad.

Es decir que no había propiedad de la tierra, sino que se le daba a las familias el derecho de usufructúo por 50 años, finalizados los cuales, se evaluaba: si la habían hecho producir, se les devolvía e, incluso, se les podía ampliar el terreno; mientras que, si no producían, se les quitaba.

¡¡¡¡¡¡¡GRITÁ ALCORTA QUE NO TE ESCUCHAN!!!!!!!

Qué bueno sería ver al Gobierno y a la Federación Agraria sentarse a dialogar sin las distorsiones que malhechores –laderos a ambos lados– producen en el diálogo.

 

EL COMANDANTE MOISÉS

Por el pensamiento de esta gente, llegamos a la conclusión de que Moisés era comunista.

“El Comandante Moisés”, para los amigos terratenientes.

Sin duda, el filósofo de cabecera ha de ser Slavoj Zizek, quien afirma que Jesús era como Marx y San Pablo como Lenin, ideólogo e institucionalizador.

Es tal la ignorancia y desinformación, que el poder religioso ha desarrollado acomodando su mensaje  para el desarrollo impúdico de las castas gobernantes a través de la historia, que inhiben al pueblo de conocer los derechos que su Creador le ha otorgado.

Es necesario hacer un cauto llamado a esta gente, porque Dios ha actuado en el pasado en situaciones similares. Su consejo se deja ver en el mensaje del profeta Jeremías:

Así dijo Jehová: Desciende a la casa del rey de Judá, y habla allí esta palabra, y di: Oye palabra de Jehová, oh rey de Judá que estás sentado sobre el trono de David, tú, y tus siervos, y tu pueblo que entra por estas puertas. 
Así ha dicho Jehová: Haced juicio y justicia, y librad al oprimido de mano del opresor, y no engañéis ni robéis al extranjero, ni al huérfano ni a la viuda, ni derraméis sangre inocente en este lugar. Porque si efectivamente obedeciereis esta palabra, los reyes que en lugar de David se sientan sobre su trono, entrarán montados en carros y en caballos por las puertas de esta casa; ellos, y sus criados y su pueblo. Mas si no oyereis estas palabras, por mí mismo he jurado, dice Jehová, que esta casa será desierta. Porque así ha dicho Jehová acerca de la casa del rey de Judá: Como Galaad eres tú para mí, y como la cima del Líbano; sin embargo, te convertiré en soledad y como ciudades deshabitadas. Jeremías 22.1-6.

Llega la hora de la Justicia, aún sobre quienes se creen inmunes al soberano juicio divino.

Su Reino, tan mentado y pedido su advenimiento en el Padre Nuestro, llega con estos principios de justicia, los cuales se dejan ver en el líbro del profeta Amós 4.6-12

“Os hice estar a diente limpio en todas vuestras ciudades, y hubo falta de pan en todos vuestros pueblos; mas no os volvisteis a mí, dice Jehová. (Escasez por desabastecimiento). También os detuve la lluvia tres meses antes de la siega; e hice llover sobre una ciudad, y sobre otra ciudad no hice llover; sobre una parte llovió, y la parte sobre la cual no llovió, se secó. (Sequía) Y venían dos o tres ciudades a una ciudad para beber agua, y no se saciaban; con todo, no os volvisteis a mí, dice Jehová. 

Os herí con viento solano y con oruga; la langosta devoró vuestros muchos huertos y vuestras viñas, y vuestros higuerales y vuestros olivares; pero nunca os volvisteis a mí, dice Jehová. Envié contra vosotros mortandad tal como en Egipto; maté a espada a vuestros jóvenes, con cautiverio de vuestros caballos, e hice subir el hedor de vuestros campamentos hasta vuestras narices; mas no os volvisteis a mí, dice Jehová. (Pestes, plagas, epidemias, inseguridad) Os trastorné como cuando Dios trastornó a Sodoma y a Gomorra, y fuisteis como tizón escapado del fuego; mas no os volvisteis a mí, dice Jehová. (Crísis internacional) Por tanto, de esta manera te haré a ti, oh Israel; y porque te he de hacer esto, prepárate para venir al encuentro de tu Dios, oh Israel. Porque he aquí, el que forma los montes, y crea el viento, y anuncia al hombre su pensamiento; el que hace de las tinieblas mañana, y pasa sobre las alturas de la tierra; Jehová Dios de los ejércitos es su nombre.”

Toda similitud con nuestra realidad, nos hace sospechar que la Justicia Divina está llegando.

Este es un llamado al arrepentimiento genuino y al cambio de actitudes.

Será menester conocer cuál es Su pensamiento y desear caminar en él, para que la vida cambie y esta realidad, de temores y muerte, se transforme dando paso a una nueva y maravillosa realidad, la cual a la luz de Sus Palabras y de las evidencias históricas, llegará de todas formas.

 

ROMPER LA PALANCA

En nuestra vecina y hermana nación de Bolivia se acaba de aprobar la discusión de la reforma de la Constitución, que intenta poner un límite de 10.000 has. a la posesión de campos.

Esto produjo la reacción de familias terratenientes, a quienes el ex presidente Hugo Banzer Suárez les cedió gratuitamente campos de 160.000 has. En el departamento de Pando, asesinaron a campesinos, atacándolos con fuego de ametralladoras y con explosiones de dinamita. La Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) se reunió de urgencia en Chile y respaldó al presidente Evo Morales.

¿Qué pasaría en Argentina si se tomaran las mismas medidas? ¿Cuál sería el voto de la gente si se expusiera a la decisión de las urnas la legitimidad de la propiedad de campos de millones de has? ¿Cuál sería la reacción de estos grupos?

Sabia, la Ley de Dios, puesto que, el Jubileo, proveniente de júbilo, festeja la justicia de saber que el esfuerzo es recompensado. Cualquiera podía tener cuanto terreno necesitara en tanto que lo hiciera producir. Si necesitaba más, le compraba a algún vecino que no lo utilizaba el derecho a uso, que por el avance del tiempo, cada vez era menor, así, bajaba el costo de la tierra. Al finalizar, se evaluaba si se había producido y, de esa forma, se daba trabajo a muchos. Premiaba a los que trabajaban y no cercenaban derechos al crecimiento ni entregaban privilegios a quienes no producían, evitando que amasaran fortunas con la explotación del arrendamiento de las tierras.

¡¡¡Si se escuchara al Dios del comandante Moisés, qué fácil sería todo!!!

Si la primera medida para cambiar es dejar de escuchar discursos para evaluar hechos, la segunda es ser libre del miedo.

Jesús decía: “Conoceréis la verdad y os hará libres”.

El apóstol San Juan dijo: En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor.”, 1ª Juan 4.18

El amor de Dios es el único poderoso para romper la palanca de Sarmiento.

A fuerza de milagros, Él trae justicia, en el más amplio y estricto sentido de la palabra.

Escuchar testimonios de personas desposeídas y sufrientes, ahora prósperos; enfermos sanados;  esclavos de drogas, libres; gente de delito, regenerada y el pueblo que sufría y vivía en temores, lleno de fuerzas y entusiasmo, alienta.

Una nueva generación se levanta y es bueno que sepas que puedes ser parte de ella.

Sólo resta que te acerques a Aquel que puede darte lo que las desigualdades e injusticias te robaron y roban.

Jesús te ama y quiere cambiar tu realidad.

VEN, ROMPAMOS LA PALANCA DE MIEDO Y LA INSEGURIDAD.

 

CONCIENCIA + MEMORIA

El tercer paso, después de dejar de escuchar, para ver y de ser libres del temor, es tener conciencia y memoria.

La historia argentina está plagada de sangre y miedo.

Matanzas, fusilamientos, guerrillas, represiones, pululan en nuestra historia.

¿Quién no recuerda el intimidante cartel cilíndrico giratorio, colocado en el Obelisco que decía: “El silencio es salud”? Un doble mensaje, fuertísimo, en los años de la represión más cruenta de nuestra historia. Ha llegado el momento de romper con ese silencio.

Debemos llamar las cosas por su nombre y recordar los hechos y personajes, no dejándonos llevar por la desinformación imperante de biombos mediáticos y operaciones de prensa que producen amnesia.

Detrás de cada homicidio y robo, se encuentra el padre de la mentira, el diablo, tal como se ve en los Evangelios. Este opera por medio de los hombres, por eso a la dirigencia de su tiempo Jesús le dijo: Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.”, San Juan 8.44 

Para aquellos que mal obraron, hay lugar mediante el arrepentimiento y la renuncia a esa herencia cruel que viene del padre de la mentira, los homicidios y el robo.

“Arrepentíos y haced frutos dignos de arrepentimiento”, decía Juan el Bautista.

Trabajar en silencio y humildad y, después de haber dado fruto, recién hablar.

Para quienes estamos trabajando, continuar con fervor.

Para quienes quieren intervenir, no busquen corporativismos, ni apoyos para sus posturas, simplemente, trabajen, desinteresadamente, con la gente, que quien siembra, cosecha.

 

UN CAYADO, UN APRISCO

Para finalizar, en estos tiempos, peligrosamente, difíciles, quiero mostrarte un aprisco, un lugar de descanso y seguridad. En él, quien te cuida, es quien trae la Justicia con su Reino.

“Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y salteadores; pero no los oyeron las ovejas. Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.  El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.  Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa. Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas. Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen, así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas. También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor. Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar.”, San Juan 10.7-17